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El pleno de la Cámara de Cuentas de Andalucía ha aprobado recientemente el documento de directrices técnicas de la «Fiscalización de determinadas áreas del Ayuntamiento de Bormujos. Ejercicio 2023», toda vez que dicho municipio sevillano estuvo gobernado hasta junio de ese año por el socialista Francisco Molina y el resto del año por la popular Dolores Romero, fruto de las últimas elecciones municipales.
Con esta actuación se mantiene la labor fiscalizadora en aquellos municipios que, comprendidos en el tramo de población de entre 10.000 y 20.000 habitantes, no han sido objeto todavía de una fiscalización específica y, además, presentan «algún tipo de incidencia en la rendición de sus cuentas», según la Cámara de Cuentas.
El objetivo de la auditoría financiera es concluir, en términos de seguridad limitada, sobre si los estados contables relacionados con las áreas a fiscalizar reflejan la imagen fiel de la realidad económico-financiera y presupuestaria de la entidad.
Para la auditoria de cumplimiento, el objetivo es concluir en términos de seguridad limitada, sobre si las actuaciones y operaciones relacionadas con las áreas que conforman el alcance material se han desarrollado, en todos sus aspectos significativos, conforme al marco normativo de aplicación.
Entre otros aspectos, serán abordados el presupuesto general, la liquidación del presupuesto y la cuenta general, las modificaciones presupuestarias, los ingresos, la tesorería y las contrataciones salvo las menores.
El alcance temporal del trabajo se limitará al ejercicio 2023. Sin embargo, en caso de ser necesario se desarrollarán pruebas y procedimientos de auditoría sobre datos, informaciones o actividades de ejercicios anteriores o posteriores, según la Cámara de Cuentas.