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El sorteo del Cuponazo de la ONCE de este viernes 16 de mayo ha repartido parte de su fortuna en la localidad sevillana de Carrión de los Céspedes. Adrián Robledo, vendedor de la ONCE desde 2019, ha sido el encargado de llevar la suerte a su pueblo, vendiendo seis cupones premiados con 40.000 euros cada uno y dejando así un total de 240.000 euros entre sus vecinos.
La alegría por el premio llega en una semana especialmente emotiva para Adrián, que hace apenas unos días despedía a su madre, Ángeles Gómez, una mujer muy querida en Carrión. «Me siento muy orgulloso de ser su hijo. Solo pareciéndome a ella la mitad, sé que soy una gran persona», confesaba emocionado tras conocer la noticia. Convencido de que su madre ha tenido mucho que ver con este premio, Adrián afirma: «Ella ha puesto la mano para este premio».
Los cupones premiados fueron adquiridos por trabajadores del restaurante ‘El Chaparral’, a la entrada del municipio, un lugar habitual en su ruta de ventas ambulantes cada viernes. «La gente se lo merece. Yo también me lo merezco», aseguraba con orgullo.
El valor de una sonrisa
Más allá de los premios, Adrián destaca lo que para él es lo mejor de su trabajo: «Lo más bonito es sacarles una sonrisa a las personas cada día. Me buscan y creo que es por el trato que les doy. Uno siempre actúa de psicólogo o abogado, siempre tengo un buen consejo, una buena palabra, algo de ánimo», explica.
El vendedor no oculta su satisfacción por formar parte de la ONCE. «Buscaba estabilidad económica, eché los papeles, y cada día me siento más orgulloso y feliz. Tengo varias estrellas en el cielo que me ayudan. Ojalá vuelva a dar pronto otro premio y ayude a muchas personas más», concluye.