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La Audiencia de Sevilla ha condenado a penas de entre un año y medio y dos años de prisión, a cuatro miembros de un grupo dedicado al tráfico de droga como hachís, cocaína y MDMA, que operaba desde viviendas de Castilleja de la Cuesta y Bormujos. La Sección Tercera de la Audiencia sevillana declara probado, por expreso reconocimiento de los acusados, que los mismos, «desde fecha indeterminada, pero en todo caso antes de enero de 2016, se han venido dedicando a la adquisición, almacenamiento, venta y distribución de hachís».
Según el relato de hechos probados, uno de los acusados de venta de droga «empleaba su domicilio de Castilleja de la Cuesta, así como la vivienda en un terreno rústico entre Mairena del Aljarafe y Bormujos y un vehículo Nissan Almera al que habían superpuesto la matrícula». A este, se suma otro coche modelo SEAT Córdoba propiedad del padre del encartado de Castilleja.
Persecución policial
El 15 de diciembre de 2015, este primer encartado y otro miembro del grupo «portaban a bordo del vehículo Seat Córdoba gran cantidad de sustancia que pretendían distribuir» y «a la altura de la Ronda de la Negrilla, en Sevilla, constataron que le seguían vehículos policiales, que les habían dado el alto». El primer acusado, «a los mandos del vehículo, trataba de esquivar la persecución circulando a gran velocidad, obviando las más mínimas normas de circulación, poniendo en peligro al resto de usuarios de la vía, que debían esquivarle para evitar una colisión, hasta que finalmente, colisionó contra un vehículo».
El otro acusado, según el relato de hechos probados, «aprovechando la confusión de la irregular conducción de su compañero, arrojó una bolsa en la que portaban hasta 80 tabletas de resina de cannabis», intervenida por los agentes. Al día siguiente se llevó a cabo un registro en la vivienda de Castilleja del primer inculpado por venta de droga, donde descubrieron «un sobre con 1.850 euros en metálico, entregado por una vecina». Además, descubrieron casi 220 gramos de resina de cannabis, una bolsa con 60 gramos de marihuana, una planta de marihuana, varias decenas de comprimidos de medicamentos como OXA y Clenbuterol, «sustancia cuya comercialización no está autorizada en España», cinco cartuchos de escopeta y 2.740 euros en dinero fraccionado.
Un arma de fuego encontrada en Bormujos
En la vivienda de Bormujos se encontró una escopeta Beretta de calibre compatible con los cartuchos anteriores, así como 25 nuevos cartuchos, 5,2 gramos de MDMA y 2,6 gramos de cocaína, entre otros efectos. En el caso del cuarto acusado, según precisa la sentencia, «sorprendido en la calle Ortega y Gasset de Sevilla mientras portaba en su vehículo Jeep, portaba un envoltorio de 39,8 gramos de cocaína» y otra bolsa con casi 22 gramos de MDMA. Según el fallo, toda la droga incautada habría tenido un valor de 18.969 euros en el mercado ilícito.
Tras el reconocimiento de los inculpados, el tribunal condena al primer acusado a dos años de cárcel, así como a una multa de 8000 euros y diez meses de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores. Otro de los acusados es condenado a un año y medio de cárcel y multa de 8.000 euros; un tercero a dos años de prisión y la misma multa; y el cuarto a dos años de prisión y multa de 2.000 euros.