El Aljarafe es una de las zonas provincias más afectadas por las altas temperaturas que está dejando esta ola de calor que la Península Ibérica está sufriendo esta semana y que dejará cifras que rondarán los 45 grados para la recta final de la semana. La peor parte comenzará el miércoles, cuando se espera que los termómetros escalen hasta esos 45 grados. La última actualización de los datos de la Agencia Estatal de Meteorología eleva la alerta naranja activada estos días a la roja por las altas temperaturas en la campiña sevillana.

Para el jueves las máximas seguirán en torno a los 45 grados pero lo peor será que aumentarán las mínimas, por lo que dormir por la noche será una tarea complicada si uno se recurre a un sistema de refrigeración. Esas mínimas pronosticadas para el jueves 14 de julio serán de 26 grados al igual que el viernes, en cuya jornada no está previsto que los termómetros pasen de los 43 grados, una temperatura muy alta a pesar de bajar dos grados.

De cara al fin de semana se espera que las temperaturas sigan bajando levemente pero seguirán siendo preocupantes las temperaturas que se alcanzarán por las noches, que moverán entre los 24 y los 25 grados centígrados.

Sevilla podría sufrir otro episodio de calima, aunque leve

Además de la altas temperaturas en el Aljarafe, lo novedoso será que los mapas reflejan que una nube de polvo subsahariano rozará la zona suroeste de la Península Ibérica, y se podría notar ese polvo en el ambiente en la zona sur de la provincia Sevilla, Huelva, Cádiz y el sur de Extremadura.

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