El pasado 21 de noviembre, sobre las 02.18 horas de la madrugada, la central COS de Guardia Civil de Sevilla recibe aviso del Servicio de Emergencias 112 de Sevilla, en el que se informa de una «incidencia sin determinar». Al parecer han recibido llamada de una mujer que solo dijo: «¿Por qué, por qué?» no respondiendo a ninguna pregunta y no indicando si le pasa algo. Por la voz, indican que parecía una señora mayor y tras 3 llamadas no les ha sido posible contactar con ella.
La Guardia Civil consigue averiguar que el teléfono de la persona está registrado en un domicilio ubicado en una calle de Bormujos. Se avisa a la patrulla más próxima para que acuda al lugar. Los agentes llaman reiteradas veces pero nadie les abre la puerta. El operador de la central COS de la Guardia Civil realiza llamada telefónica de nuevo al número de la persona que llamó al 112, por si decía algo reseñable y a fin de poder comprobar que los agentes que estaban en la puerta pudiesen escuchar algún teléfono sonando en dicho domicilio. Efectivamente, la patrulla de la Guardia Civil escucha sonar el teléfono móvil justo en el momento en el que realizaba la Central la llamada, respondiendo esta persona al operador con balbuceos.
Por todo esto y ante la imposibilidad de acceder al domicilio se decide, activar a bomberos a fin de comprobar si la moradora de esa vivienda pudiera encontrarse en situación de riesgo.
Acuden dos dotaciones de bomberos de Mairena del Aljarafe, que acceden a la vivienda junto con los agentes de la Guardia Civil y se solicita urgentemente una ambulancia, al encontrarse una mujer de avanzada edad semi-inconsciente en el suelo. Al parecer se había caído al suelo, y se encontraba aturdida, debido a su edad y al estar recibiendo quimioterapia, no residiendo persona alguna con ella y encontrándose sola, de ahí que no respondiera. Los agentes localizan el teléfono móvil que estaba bajo el cuerpo de la señora tras la caída. Debido a que usa audífono y se le había caído, no podía escuchar nada.
La mujer fue evacuada en ambulancia rápidamente al Hospital San Juan de Dios de Bormujos, acompañada de dos familiares, para realización de un reconocimiento médico más exhaustivo. Los facultativos informaron que de no ser por la rápida actuación, debido al estado de debilidad en que se encuentra, esta persona podría haber fallecido de hipotermia.