Durante la mañana de hoy, en la comisión informativa previa al Pleno municipal de Castilleja de la Cuesta, se ha rechazado que la propuesta de Adelante para una «gestión ética y responsable de las colonias felinas» acceda a debatirse en la próxima sesión plenaria del consistorio.
La iniciativa ha recibido el contra el voto del PSOE, las abstenciones de PP y Ciudadanos y el voto favorable de los promotores de la moción, Adelante Castilleja. Con esta propuesta se pretendía la puesta en marcha «a la mayor brevedad posible» del método CER (Captura, Esterilización y Retorno) para evitar la sobrepoblación de estos animales con un sistema garantista del bienestar animal.
Los motivos esgrimidos por el equipo de comunicación del Ayuntamiento de Castilleja es que el grupo socialista, que ostenta el gobierno con mayoría absoluta, considera más conveniente «esperar a la Ley de Bienestar Animal que se está tramitando en el Parlamento Andaluz, y que el pasado 6 de abril se inició su tratamiento como antreproyecto legislativo.
«Se considera que una vez la ley esté aprobada se modificarán los protocolos y medidas actuales, y se desarrollará un marco jurídico actual que no entre en contradicción con medidas que se puedan aprobar ahora en la ley autonómica», indican desde el grupo socialista.
Desde Adelante no comprenden esta posición, ya que consideran que la ley actual «ya les obliga» a aplicar este tipo de protocolos y que la próxima ley contiene sus propuestas». «¿Acaso todos los pueblos que aplican el CER están actuando contrario a la ley andaluza y a la normativa actual?», se pregunta Teresa Pablo, portavoz del grupo municipal Adelante Castilleja.
Desde esta formación entienden que el PSOE no tiene voluntad de aplicarla «porque es propuesta de Adelante, es puro sectarismo», añaden. Manuel Villegas, concejal también de Adelante, también muestra su indignación: «O sea, que mientras que la Junta saca la ley, los gatos se mueren».
Captura, esterilización y retorno
El sistema CER que recogía la moción pretende controlar las colonias felinas a través de la esterilización, favoreciendo la existencia de una población determinada por los beneficios que supone su presencia para el ecosistema urbano.
«Son muchas las personas que, de manera voluntaria, cuidan estas colonias, alimentan a los gatos y hasta les proporcionan cuidados veterinarios, prestando un inestimable servicio ciudadano a pesar de la oposición que encuentran en parte de sus convecinos», apuntan su portavoz Teresa Pablo, quien advierte que a veces esto deriva en problemas de convivencia.
«Sólo la intervención municipal puede solucionar el potencial problema en que esto puede convertirse, no sólo de convivencia vecinal sino también de salud pública», apunta Teresa Pablo. Desde su formación añaden que castrar a los gatos tiene «un coste económico, obviamente, y la vecindad que de manera voluntaria cuida las colonias no puede soportar» a pesar de saber que es «imprescindible» para evitar que la cantidad de gatos vaya aumentando sin control.
Según explica Adelante, son varios municipios aljarafeños como Camas, Santiponce, Bormujos o Sanlúcar los que optan por «la convivencia en el espacio urbano con los gatos ferales y callejeros que, bien cuidados y en número controlado gracias a la castración de ejemplares adultos, convierten las calles en espacios amables y libres de ratas».