La madre de los dos niños de Coria del Río que arrojaron resultado positivo en acetona y N-hexano, en el marco de la investigación de los episodios de hedor que desde hace años sufre la barriada Guadalquivir, caso por el que el Juzgado número tres de dicho municipio indaga un presunto delito contra el medio ambiente con afección grave a la salud de las personas, ha insistido este viernes en su demanda de que los niños sean tratados específicamente en el hospital Virgen del Rocío, dada su situación.
Mientras en la mencionada investigación judicial están investigados entre otros los responsables de la empresa Zamarilla Inversiones, gestora de una gasolinera donde habría sido detectado un vertido de hidrocarburos origen de la incidencia, en una reclamación formalizada el pasado mes de marzo ante la Junta de Andalucía, esta vecina de la citada barriada explicaba que cuenta con dos hijos menores de edad que en 2019 fueron sometidos a los análisis de toxicología realizados entonces a parte de la población de la zona a cuenta de los episodios de hedor.
Tales pruebas, según detallaba, arrojaron resultado positivo para «ambos» niños en acetona y N-hexano, un disolvente orgánico con «acción tóxica», según reflejaba tiempo atrás un informe del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses de Sevilla. Ello, cuando según esta vecina, desde 2017 los menores «no han parado de sufrir episodios de dolores de cabeza, fatiga y mareos».
El hospital y el centro de salud
Según la reclamante, pese al resultado de las mencionadas pruebas de 2019, la Administración sanitaria «no se ha preocupado de hacer ninguna prueba ni seguimiento» adicional a los menores. «Cada vez que he llevado a los niños al médico con dolores continuos de cabeza y fatiga les han mandado Ibuprofeno y Paracetamol, pero nada más», lamentaba la mujer, señalando que el hospital al que ha elevado el asunto «deriva» el mismo al pediatra del centro de salud al que están adscritos los menores.
Ahora, esta mujer ha explicado a Europa Press que tras entrevistarse a comienzos de mayo con la dirección del área de Infantil del hospital Virgen del Rocío, obtuvo el compromiso de que comenzarían las gestiones para «estudiar» el caso de estos menores y que los mismos fuesen tratados por el departamento de Medicina Interna del citado centro.
Pero días más tarde, recibía una carta en la que, textualmente y merced a su reclamación de marzo, el área de Pediatría del hospital Virgen del Rocío indica que «según los datos clínicos y analíticos del momento actual», los facultativos no pueden «establecer relación causa/efecto entre la sintomatología» señalada respecto a los niños, «cefaleas frecuentes de escasa intensidad sin otro síntoma», y la intoxicación aludida.
Tomar las cifras «con cautela»
«Aunque la intoxicación por acetona suele cursar con cefaleas, presentes en sus hijos, también suele hacerlo con disatria y alteraciones en el nivel de conciencia; y la de N-hexano con síntomas de prolineuropatías ausentes en sus hijos», señala esta carta recogida por Europa Press, exponiendo que por estos motivos «las cifras de acetona aportadas deben ser tomadas con cautela».
En ese sentido, los facultativos exponen estas razones para que la evolución de los menores sea acometida desde su centro de salud habitual, ante lo cual esta mujer asegura que en un nuevo contacto con la dirección del área de Infantil del hospital Virgen del Rocío, le aseguraron según su testimonio que pese al contenido de la carta, el caso de sus hijos estaba aún «en estudio».
«Eso sucedió hace ya más de un mes, pero no nos llaman», ha lamentado esta mujer ante la falta de «respuestas» por parte de la Administración sanitaria, a la que reclama que sus dos hijos sean tratados en el centro hospitalario, «al igual que los adultos» vecinos de Coria que arrojaron también resultado positivo en acetona y N-hexano al ser sometidos a las mismas pruebas.