Maradona junto a Monchi y otros jugadores del Sevilla durante una fiesta en su casa del Aljarafe. Foto de A la Contra.
Maradona junto a Monchi y otros jugadores del Sevilla durante una fiesta en su casa del Aljarafe. Foto de A la Contra.

Hoy todo el planeta fútbol llora a quien fue ilustre vecino aljarafeño durante menos de un año. Era septiembre de 1992 cuando Diego Armando Maradona firmaba por el Sevilla Fútbol Club tras vencer la suspensión de quince meses de la FIFA por su positivo en cocaína.

Fue el italiano Silvio Berlusconi quien principalmente pagó la clausula del futbolista, el argentino Carlos Bilardo quien lo convenció, y el torero Juan Antonio Ruiz Espartaco quien le dio hogar, en la urbanización alajarafeña Simón Verde.




Maradona se quedó encandilado por la casa del torero, decorada con motivos andaluces y taurinos pero con una barbacoa demasiado pequeña. «No hizo ningún cambio en la casa, lo único que me pidió fue que le hiciera la barbacoa más grande. El asado es sagrado para los argentinos. Le dije: Ningún problema, Diego, esta es tu casa», comentaba el torero de Espartinas.

Entre Gelves y Mairena, esta urbanización era la más selecta de una época en el que el Aljarafe acumulaba una década de expansión acogiendo a las familias sevillanas más adineradas. Allí se situaba «Villa Espartinas», uno de los mejores chalés de la zona.

El entonces sevillista le pagaba 800.000 pesetas al mes y celebró allí su treinta y dos cumpleaños donde la argentina Fabiana Cantilo, una estrella de la época, cantó por sorpresa. Se dieron cita el plantel al completo nervionense con Prieto, Rafa Paz o Monchi, y también acudieron jugadores del Napoles con los que campeonaron temporadas atrás, entre ellos el mítico Careca.




«Nos juntamos entre 60 y 70 en su casa. Fue una noche muy divertida, pero si la gente espera que esa fiesta fuera una locura, no fue así. Fue una fiesta que tuvo su principio y su fin. Fue la primera vez que entendimos la cantidad de gente que podía reunir la familia Maradona», comenta Prieto a la revista futbolera A La Contra.

Fugaz sevillista para lamento de Espartaco

Maradona jugó un total de 26 partidos de Liga, en los que marcó cinco goles, dos con el pie, dos de penalti, uno de falta ante el Celta de visita, y dio nueve asistencias en el campeonato liguero. El Sevilla quedó séptimo. «Yo quería que marcara muchos goles porque así renovaría y se quedaría en la finca. No me esperaba que se marchara tras un año», comenta Espartaco a la revista taurina aplausos.

«Me acuerdo un día que estábamos sentados al lado de la piscina. Estaba con una pelota de tenis, me dijo que dónde quería que pusiera la pelota, le dije que eso era imposible y no sé qué hizo con la pelota pero fue increíble«, asegura Espartaco.

Deja un comentario