La Feria de Tomares encara su recta final tras una noche, la del viernes, que registró una importante afluencia de público. Tomareños y de vecinos de Sevilla y de otras localidades cercanas llenaron las calles del recinto ferial y disfrutaron de la animación de las casetas y de las actuaciones musicales, encabezadas por Raúle.
El compositor y músico jerezano cautivó con la fusión de flamenco, pop y funk, marca de su estilo. Una puesta en escena muy aplaudida por los asistentes, que abarrotaron la Caseta Municipal.
El artista subió al escenario para interpretar sus grandes éxitos y presentar su segundo álbum, Limbo. Temas, como La habitación perdida, que cuenta con millones de reproducciones en plataformas digitales, o Colegas antibalas, fueron coreadas por el público, que vibró con su actuación.
Raúle no defraudó a unos asistentes entregados, con ganas de disfrutar y darlo todo y encandiló a todos con su personalidad y su original propuesta musical.
Antes, tocó rememorar algunas de las canciones más míticas de la música española con La Edad de Oro del Pop Español. Éxitos del pop de los 80 y 90 que animó e hizo bailar al público de todas las edades al ritmo de canciones pegadizas y emblemáticas de dos décadas inolvidables de la música española. Noche musical de gran acogida, que finalizó con la voz de Ale Bellido.
Un gran viernes, el que vivió ayer la Feria de Tomares, que colgó el cartel de “lleno absoluto” y en la que predominó el buen ambiente desde mediodía, con el tradicional y popular Concurso de Arroces y la actuación del joven Carlos Luque.