El pasado 5 de enero, a sus majestades los Reyes Magos le dieron el alto en su camino hacia Umbrete por parte de la Policía Local. Junto a tres pajes reales y en una carroza se encaminaban hacia la localidad aljarafeña para visitar a sus niños y niñas.

Tras ser identificados por las autoridades, grabaron un vídeo quejándose del alcalde de Umbrete, Joaquín Fernández Garro, por impedir esta carroza alternativa. Aún desconocen si les llegará alguna multa.

Previamente, el propio Ayuntamiento había anunciado la llegada de los Reyes Magos a la casa consistorial, donde serían recibidos y desde donde se dirigirían a los más pequeños a través de streaming. Cabe recordar que Umbrete mantiene la incidencia acumulada más alta de la comarca, triplicando la media provincial, con 427,3 contagios por cada 100.000 habitantes, superando incluso a la Comunidad de Madrid.

«Hay un par de patrullas de la Guardia Civil dando vueltas por el pueblo buscando a tres delincuentes», dice la organizadora de estos Reyes Magos alternativos a través de su vídeo. Denuncia que por no ser «idea del alcalde», no se les ha permitido visitar las casas umbreteñas: «lo hemos hecho lo mejor posible durante un mes. Gracias señor alcalde por ser tan perfecto«, concluyen irónicamente su comunicado.

Loli, la organizadora de la carroza en declaraciones a este diario, asegura que presentaron una instancia al ayuntamiento que no fue contestada hasta una hora antes, instando que se abstuvieran de celebrar el evento, y advirtiendo de consecuencias en el caso de no obedecer. «Claro, con una hora antes de aviso y todo preparado, decidimos a salir. Solo queríamos saludar a los niños, sin caramelos ni fotografías ni nada. Es imposible que contagie a nadie porque llevo semanas sin salir siquiera a un bar«, explica la organizadora, que sufragó con otras vecinas los gastos: «el caballo es mío, y los disfraces prestados. Las barbas las compramos nuevas por precaución con el covid».

Desde el equipo de gobierno aseguran a AljarafeDigital que la instancia fue respondida días antes con una llamada de la propia delegada explicando la decisión, motivada por la situación sanitaria y la imposibilidad de, «con tres agentes locales», asegurar el control de una cabalgata: «Todos hemos visto las imágenes de Valencia», añaden.




En las redes sociales la polémica se ha disparado, con numerosas alusiones a la «falta de sensibilidad del alcalde» y unas pocas llamadas a la responsabilidad por el azote del coronavirus. «En otros pueblos como Tomares y Castilleja sí se han hecho eventos para los niños. Es una vergüenza lo de este alcalde, luego dicen que si nos quejamos por vicio», dice uno de los cientos de mensajes.

Desde el Ayuntamiento de Umbrete, en un comunicado, se aludió a las recomendaciones sanitarias para evitar cualquier tipo de aglomeración en torno al recibimiento de los Reyes Magos, por ello aseguraba, de forma anticipada a la cabalgata alternativa, que el streaming sería «el único acto» que ha organizado el Gobierno local. Además rogaban por un «comportamiento ciudadano responsable y prudente, no organizando ni colaborando con iniciativas que, aunque parezcan divertidas para los niños, pueden entrañar un grave peligro para la salud».

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