La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) contempla en sus previsiones alerta amarilla en el Aljarafe por fuertes lluvias y vientos en la mañana del miércoles. El aviso supone la vuelta de las precipitaciones tras el paso de Filomena, la borrasca que a principios de mes dejaba sin luz a varios puntos de la comarca.
Así, AEMET fija un aviso amarillo entre las 08:00 y las 15:59 horas de la mañana para la campiña sevillana, entre las que podrían registrarse precipitaciones de 15mm cúbicos en una hora. Las precipitaciones irán acompañadas de una leve caída de las temperaturas. Si en los últimos días los termómetros se reponían del frío vivido en las últimas semanas, a partir de mañana las mínimas se resentirán ligeramente.
En Tomares, donde AEMET posee una estación en el Club Zaudín Golf, se prevé hasta el mediodía un 100% de precipitaiones el miércoles, con una temperatura mínima de 10 grados y una máxima de 18. Ya en la tarde, el riesgo baja al 85%. Pese a todo, la amenaza de lluvia no desaparecerá por completo, ya que se prevé riesgo de precipitaciones hasta entrado el fin de semana.
¿Cómo funcionan las alertas de la AEMET?
Existen cuatro niveles de alertas que van desde el verde hasta el rojo. El verde hace referencia a la ausencia de riesgo riesgo, el amarillo y naranja se activan cuando ya los hay: el amarillo concierne a aquellas situaciones donde no existe un riesgo para la población general sino solo para actividades y sectores poblacionales concretos, mientras que la alerta naranja se decreta cuando existe riesgo para la generalidad de la población.
Por último, la alerta roja comporta riesgo extremo debido a «fenómenos meteorológicos no habituales de una intensidad excepcional», por lo que la población debe incorporar prevenciones importantes.
Recomendaciones para el aviso amarillo
Pese a que este nivel de alerta no comporta grandes preparaciones, Algunas actividades, señala la Agencia, pueden verse afectadas. AEMET recomienda permanecer atentos a la información meteorológica, ante el caso de que eventualmente esta pudiera cambiar.
Además, no se debe conducir por una carretera inundada o cruzar un puente o paso subterráneo con agua, ya que la fuerza de la corriente podría arrastrar el vehículo, con el consiguiente riesgo para la vida de sus ocupantes.