Imagen de archivo de paquetes de cocaína confiscados por la Policía Nacional / Europa Press
Imagen de archivo de paquetes de cocaína confiscados por la Policía Nacional / Europa Press

La Audiencia de Sevilla juzgará este lunes a dos policías nacionales y un guardia civil presuntamente involucrados en un caso de tráfico de drogas. Este juicio se iba a celebrar el pasado mes de noviembre, pero fue aplazado.

Según los avances de la investigación, un total de once acusados, incluyendo a estos agentes y a un escolta privado del Ministerio de Interior, fueron responsables de esconder un alijo de 368 kilos de cocaína en una nave industrial de Carrión de los Céspedes. Este cargamento, a su vez, se encontró en los bajos de un contenedor de fruta.

Esta presunta organización criminal, en primer lugar, recogió la cocaína escondida en una caja de piñas en un camión en el Puerto de Málaga. Posteriormente, se detuvieron en Dos Hermanas para cambiar el cargamento de camión, evitando levantar sospechas.

Este otro camión llegó a una nave alquilada por uno de los acusados en el polígono Novopark de Carrión de los Céspedes. En el interior de la nave, mientras varios de los involucrados vigilaban la zona en un coche, se dispusieron a extraer el cargamento.

Sorprendidos mientras descargaban un alijo de cocaína en el Aljarafe

La operación fue frustrada por la Policía, que llegó a esta nave industrial deteniendo a los ocupados de descargar la droga y también a los «vigilantes» que trataban de supervisar estas labores.

El contenedor intervenido contenía 365 paquetes cuyo peso arrojó 367,8 kilogramos de cocaína de una pureza del 79%. Su precio ronda los 14,45 millones de euros al por mayor y los 37,9 millones de euros al por menor.

La Fiscalía pide un total de ocho años de prisión para los involucrados, así como una multa de 45 millones de euros. También se encargó la destrucción del alijo encontrado y las armas confiscadas en la investigación.

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