Imagen de un caso de Bullying en un centro escolar / Wikimedia Commons
Imagen de un caso de Bullying en un centro escolar / Wikimedia Commons

El bullying sigue a la orden del día entre menores escolares. El caso de un centro educativo privado del Aljarafe así lo ha demostrado según adelanta Diario de Sevilla. La familia de la supuesta víctima de tal acoso escolar ha denunciado ante la Fiscalía de Menores a un grupo de alumnos por un delito de odio y discriminación por razón de género y orientación sexual.

Un bullying asociado a la identidad sexual entre menores

Definida por la parte de la acusación como «auténtica pesadilla», todo empezó cuando el menor con trece años expresó ser transgénero bisexual. Desde entonces, «las amenazas, el escarnio público y las coacciones por parte de muchos alumnos» no cesaron según recoge el diario anteriormente mencionado.

Trasladada la problemática al claustro del centro educativo privado del Aljarafe, la familia asegura que no hubo ninguna reacción para intentar solucionar aquello de forma interna. Es más, es posible que algún docente incitara incluso a un trato vejatorio del chico entre los alumnos. Una reacción que provocó la salida voluntaria del centro educativo por parte del menor para inscribirse en otro y huir de aquella experiencia.

Un acoso entre escolares potenciado a través de whatsapp

Una vez ya fuera del centro escolar donde, supuestamente, el hijo de la familia denunciante fue víctima de bullying, en un grupo de whatsapp de escolares de su antiguo colegio se instó a dar una paliza al que fuera ya un ex alumno de aquellas instalaciones. Todo ello se puso en conocimiento de la dirección del centro pero, según la abogada de la familia, no se tomaron cartas en el asunto. Por ello, desde el pasado 17 de marzo, todo el asunto se encuentra en manos de la Fiscalía de Menores.

Termine como termine este supuesto caso de bullying entre menores, la factura ya está siendo muy alta para la familia. El chico que se define como transgénero bisexual solo sale para acudir a su centro educativo actual por miedo a agresiones. Por ello, se han pedido medidas cautelares de alejamiento y no comunicación, entre otras, para la protección del menor de edad.

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