En relación a la ubicación de la polémica Estación de Bombeo de Aguas Residuales (EBAR) que EMASESA planteaba construir en una zona verde de la barriada San José, encontrando la oposición de los vecinos, Modesto González aseguró a este medio la mañana del pasado jueves que desde el Ayuntamiento siguen valorando la posibilidad de encontrar un emplazamiento alternativo para ubicar unas instalaciones que «exige la Unión Europea». El pasado jueves el Pleno del Ayuntamiento de Coria, reunido en sesión ordinaria, rechazó la moción presentada por el PP, que pedía trasladar la negativa a EMASESA de instalar la planta, así como informes de impacto en la salubridad y medioambiente y un período de alegaciones para los vecinos.
Este posible cambio de ubicación llega gracias a que la semana pasada se tuvo conocimiento a través del Catastro de un cambio jurídico que permitiría ponderar otras opciones. Según explicaron los vecinos a este medio, unos terrenos que llevaban años formando parte de una junta de compensación habían vuelto a su antiguo dueño, abriendo la puerta a cambios en el proyecto.
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En declaraciones a este medio, el alcalde señaló el pasado jueves por la mañana, horas antes del Pleno, que la ubicación original «quizá no sea la adecuada, porque llega 20 años después de la construcción de la barriada«, y por ello ahora que es posible estudian la posibilidad de instalar la planta en otro lugar, que en cualquier caso tendría que estar en los límites del barrio, en un solar colindante, para poder cumplir su función, explica. La construcción de la planta responde también a la normativa europea. «A finales de este año la UE exige por ley la depuración de las aguas en unas determinadas condiciones de salubridad», explicó.
El Pleno rechaza la moción del PP sobre la obra de EMASESA
Precisamente ayer jueves el Pleno de Coria del Río debatió en sesión ordinaria la moción presentada por el PP que incluía «trasladar a EMASESA la negativa de nuestro pueblo» a ubicar la EBAR,por las «connotaciones negativas que esta construcción acarrearía a la salud de los vecinos» e informes sobre el impacto en la salud y el medioambiente y los posibles olores a los que la planta y los vientos del emplazamiento podrían contribuir. Preguntado por la propuesta, González señaló a este medio que se trataba de una moción «oportunista».
Durante su intervención el concejal popular Andrés Parrado mostró su satisfacción porque se detuviera la construcción de unas instalaciones que a su juicio están «fuera de toda lógica medioambiental en la zona», recordando que también afectaría «a la barriada de enfrente, conocida popularmente como ‘el Barrio del laberinto», causando problemas «si no iguales, posiblemente superiores». Parrado admitió que «proyectos de este tipo son necesarios, pero no a cualquier precio, sobre todo cuando este era el bienestar de una barriada. Vemos necesario buscar un término medio entre la necesidad de la obra y que este proyecto esté en consonancia con la salubridad».
González reconoce que «probablemente no se informó adecuadamente» y lamenta las «falsedades malintencionadas»
Juan Antonio Bizcocho, de Adelante, intervino considerando que lo sucedido era una muestra de que «la unión hace la fuerza y el empoderamiento del pueblo consigue los fines u objetivo que se marcan». Bizcocho se refirió a la EBAR como una obra «necesaria», pero criticó la falta de transparencia: «No se puede permitir que no se informe debidamente, creyendo que esto no iba a tener ningún tipo de repercusión. Una mayoría absoluta no supone un cheque en blanco», ha criticado. Asimismo, ha expresado sus «dudas» respecto a que la notificación del Catastro llegase días después de la repercusión de las movilizaciones vecinales, después de que en reuniones previas se trasladara la imposibilidad de mover el proyecto. «¿Quizás la imagen política de este Equipo de Gobierno ha sido dañada de tal forma que han tenido que paralizar las obras?«, ha preguntado.
El concejal socialista Antonio Manuel Martínez suscribió la propuesta de la moción. «Entendemos que parte de la propuesta está realizada», dijo refiriéndose a la paralización de las obras. Martínez expresó el interés de su grupo por seguir de cerca las los avances del proyecto e inquirió al Gobierno por la razón de la urgencia por construir la obra, así como si esta tenía que ver con las intervenciones de la Blanca Paloma.
En su intervención el alcalde, Modesto González, defendió la gestión del Ayuntamiento, señalando que «el único error que este Ayuntamiento ha cometido, y así se lo reconoció a los vecinos y a ustedes, es probablemente no haber informado a los vecinos adecuadamente, hacer cierta pedagogía sobre este proyecto». Ello ha dado fruto, a su juicio, a «desinformación y falsedades malintencionadas». «El proyecto está paralizado por unas circunstancias, llamémosles, anecdóticas: el Catastro ha sacado toda la documentación, de forma que la reparcelación inicial, con la que el plan parcial del Sector 3 queda como originalmente estaba». El primer edil dijo que se informaría debidamente a los vecinos de «cualquier tipo de modificación«.